Salmo 31
En ti, Señor , busco refugio; jamás permitas que me avergüencen; en tu justicia, líbrame. Inclina a mí tu oído, y acude pronto a socorrerme. Sé tú mi roca protectora, la fortaleza de mi salvación. Guíame, pues eres mi roca y mi fortaleza, dirígeme por amor a tu nombre. Líbrame de la trampa que me han tendido, porque tú eres mi refugio. En tus manos encomiendo mi espíritu; líbrame, Señor , Dios de la verdad. Odio a los que veneran ídolos vanos; yo, por mi parte, confío en ti, Señor . Me alegro y me regocijo en tu amor, porque tú has visto mi aflicción y conoces las angustias de mi alma. No me entregaste al enemigo, sino que me pusiste en lugar espacioso. Tenme compasión, Señor , que estoy angustiado; el dolor está acabando con mis ojos, con mi alma, ¡con mi cuerpo! La vida se me va en angustias, y los años en lamentos; la tristeza está acabando con mis fuerzas, y mis huesos se van debilitando. Por causa de todos mis enemigos, soy el hazmerreír de mis vecinos; soy un espanto para mis amigos; de mí huyen los que me encuentran en la calle. Me han olvidado, como si hubiera muerto; soy como una vasija hecha pedazos. Son muchos a los que oigo cuchichear: «Hay terror por todas partes». Se han confabulado contra mí, y traman quitarme la vida. Pero yo, Señor , en ti confío, y digo: «Tú eres mi Dios». Mi vida entera está en tus manos; líbrame de mis enemigos y perseguidores. Que irradie tu faz sobre tu siervo; por tu gran amor, sálvame. Señor , no permitas que me avergüencen, porque a ti he clamado. Que sean avergonzados los malvados, y acallados en el sepulcro. Que sean silenciados sus labios mentirosos, porque hablan contra los justos con orgullo, desdén e insolencia. Cuán grande es tu bondad, que atesoras para los que te temen, y que a la vista de la gente derramas sobre los que en ti se refugian. Al amparo de tu presencia los proteges de las intrigas humanas; en tu morada los resguardas de las lenguas contenciosas. Bendito sea el Señor , pues mostró su gran amor por mí cuando me hallaba en una ciudad sitiada. En mi confusión llegué a decir: «¡He sido arrojado de tu presencia!» Pero tú oíste mi voz suplicante cuando te pedí que me ayudaras. Amen al Señor , todos sus fieles; él protege a los dignos de confianza, pero a los orgullosos les da su merecido. Cobren ánimo y ármense de valor, todos los que en el Señor esperan.
Salmo 31:1-24 NVI
Según Wikipedia La vergüenza es una sensación humana, de conocimiento consciente de deshonor, desgracia, o condenación. Su sinónimo ignominia cuya etimología remite a la «pérdida del nombre» da a entender el efecto de una acción deshonrosa o injusta, términos de los que es sinónimo. La XXI edición del diccionario de la RAE la define como una afrenta pública, en el sentido en que constituye una ofensa personal que queda a la vista de una comunidad que la condena unánimemente (https://es.m.wikipedia.org/wiki/Verg%C3%BCenza_(sentimiento))
Por muchos años me ha impactado el significado de ignominia, una palabra que conocí 11 años atrás por medio de un sueño que Dios me dió y oh sorpresa estaba en la biblia. Hoy saber que es un sinónimo de vergüenza confirma con más certeza que el plan del enemigo para nuestra vida siempre cargará un poco de esto.
Personalmente pienso que Satanás es el autor de la vergüenza, la usa para traer condenación y acusación en Apocalipsis 12:10 dice:
Entonces oí una fuerte voz que decía: «Nuestro Dios ha salvado a su pueblo; ha mostrado su poder, y es el único rey. Su Mesías (Jesús) gobierna sobre todo el mundo. »El diablo ha sido arrojado del cielo, pues día y noche, delante de nuestro Dios, acusaba a los nuestros.
Todos hemos pecado y está claro que el pecado nos aleja de Dios pero cuando tenemos la certeza que Jesús murió en la Cruz par hacernos hijos y para perdonar todas nuestras fallas y tenemos un genuino arrepentimiento, veremos el fruto de justicia efectivo en la autoridad que cargamos como hijos para callar toda vos de acusación, vergüenza, ignominia, condenación que Satanás quiera traer a nuestra vida. La sangre de Jesús te ha limpiado apropiate de ella. La obra de la cruz, el lugar de intercambio donde dejas todo tu pasado y recibes salvación, sanidad, liberación. Enceste proceso tu espíritu nace de nuevo pero toma tiempo que tu alma sea restaurada por eso debes leer y declarar la palabra, orar, interceder, congregarte y vivir una vida de obediencia al Espíritu Santo y su palabra.
Oremos con el salmo 31
Señor Jesús nos pisicionamos junto a ti en los lugares celestiales y venimos a tu trono de misericordia pidiendo que nos defiendas de toda acusación que el enemigo de nuestra alma ha traído ante ti. Destruye la vergüenza, la acusación, la ignominia, la injusticia, deshonra, condenación, culpa, temor. Buscamos refugio en ti jamás permitas que nos avergüence ni nos recuerde nuestro pasado que tu perdonaste y clavaste en la cruz. En tu justicia, liberanos. Sé tú nuestra roca protectora, la fortaleza de nuestra salvación por amor a tu nombre.
Liberanos de toda trampa que el enemigo a puesto a nuestra vida, porque tú eres nuestro refugio. En tus manos confiamos nuestro espíritu, cómo lo hizo Jesús en la cruz en la mas densa oscuridad.
Liberanos Espiritu Santo, Espiritu de verdad, revelamos todo lo oculto y engañoso en nuestro interior, revelamos todo plan del enemigo contra nuestra vida. Que sea descubierto todo lo que se oculta, que tu verdad exponga todo a la luz. Tu conoces las angustias de nuestra alma y nos has puesto en lugar espacioso.
Ten compasión de nosotros de nuestras familias, de nuestras naciones, de tu pueblo. Nuestra vida está en tus manos; Que irradie tu rostro sobre nosotros; por tu gran amor, sálvanos.
Señor , no permitas que nadie nos avergüence ni nos recuerde lo que tu ya nos perdonaste. Que sean silenciados sus labios mentirosos. Cayamos toda vos del enemigo, de nuestra carne, del mundo, del hombre. Queremos escuchar tu vos.
Cuán grande es tu bondad, que atesoras para los que te temen, y que a la vista de la gente derramas sobre los que en ti se refugian. Al amparo de tu presencia los proteges de las intrigas humanas; en tu morada los resguardas de las lenguas contenciosas. Bendito sea el Señor , pues mostró su gran amor por nosotros cuando nos hallabamos rodeados por enemigos. Renunciamos a la confusión y a todo plan de destrucción contra nuestra vida y familia porque tú siempre estás con nosotros y has escuchado nuestras oraciones.
Señor encuéntranos fieles y dignos de confianza necesitamos tu proteccion , renunciamos al orgullo ayúdanos a ser humildes como tú lo eres.
Hoy cobramos ánimo en tu presencia, tu renuevan nuestras fuerzas y nos das el valor para continuar avanzando. Aviva nuestro espíritu. Esperaremos en ti confiados que tu respuesta a nuestra oración viene en camino.
En el nombre de Jesús!
Amen
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