"Pero no podían resistir a la sabiduría y al Espíritu con que hablaba" Hechos 6:10
"Entonces todos los que estaban sentados en el concilio, al fijar los ojos en él, vieron su rostro como el rostro de un ángel. Hechos 6:15
Cundo recibes dirección de Dios y la obedeces te acercas a su voluntad el Señor te equipara con sabiduría y con el Espiritu Santo. Esteban fue elegido por Dios para ayudar a los Apóstoles, su llamado fue poderoso y la manifestación de Dios a través de el impacto a muchos. Su humildad sencillez y convicción de lo que portaba de parte de Dios llevo a muchos a que creyeran en Jesus. EL no limito a Dios el se dejo guiar y cumplió su llamado. La vida de oración de Esteban se veía reflejada cuando hablaba con sabiduría y denuedo, debemos buscar una intimidad con Dios que haga la diferencia, que se refleje donde quiera que vayamos y con quien estemos. Cuando la sabiduría de Dios viene sobre nosotros podemos ofrecer respuestas de parte de Dios a los problemas o situaciones que enfrentan las personas, no somos nosotros los que hacemos la diferencia es Dios a través de nosotros, esto lo entendió muy bien Esteban al punto de morir por lo que creyó, su corazón puro ante Dios, sensible a su voz y obediente lo llevo a terminar su carrera con honores en el cielo, murió apedreado pero lo hizo cumpliendo su llamado y murió clamando misericordia por sus enemigos; oración que rompió los cielos y abrió camino a Pablo (Saulo de Tarzo) quien fue el autor de su muerte y en poco tiempo el próximo Apostol que escribiría casi todo el Nuevo Testamento. Cuando estas lleno de Dios sabes que tienes que amar y orar por quien te persigue, por tus enemigos, perdonarlos y amarlos son ellos quien usa Dios para llevarte al siguiente nivel.
Hablemos con Dios
Padre tu todo lo conoces, sabes cual es mi llamado y para que me creaste te pido que como Esteban fue paciente para hacer tu voluntad yo pueda ser paciente; como Esteban fue obediente a su llamado yo también pueda serlo. Quiero agradarte a ti y quiero tener una relación contigo que se refleje en todo lo que haga que tu humildad marque mi corazón, que tus palabras fluyan de mi boca y la uses para sanar, liberar, aconsejar, amar a cada persona que pongas en mi camino. Hoy oro por todos los que me han herido, defraudado, maldecido porque se que los has usado para llevarme donde estoy, oro porque te puedan conocer a ti Jesus y puedan cumplir su llamado en la tierra.
"Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo.
Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu.
Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió" Hechos 7:58-60
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